La mañana de este martes 11 de enero localizaron dentro de un tanque de agua el cadáver de un adulto mayor, el suceso ocurrió en la parte posterior de una construcción de un edificio en la calle Bocayá entre Sánchez Carrero y Rivas, en la ciudad de Maracay.
De acuerdo a los documentos personales, se llamaba Héctor Guillermo González Méndez, sin embargo, era conocido por los moradores de la zona como “El Abuelo Héctor” y contaba con 74 años de edad.
Unos residentes informaron que Héctor pernoctaba en horas nocturnas cuidando una edificación en la zona ya mencionada (ejercía la función de vigilancia) y otros señalaron que se trataba de una persona en situación de calle.
Los vecinos le ayudaban con alimentos y vestimenta, así como también le suministraban medicamentos cuando se sentía enfermo. Pues, al parecer, “El Abuelo” no tenía familiar y sobrevivía a la ayuda de las personas de buen corazón.
Durante la noche del lunes, el abuelo estuvo ingiriendo licor y posteriormente, en una hora imprecisa, se habría acercado al tanque.
Al no percatarse y bajo los efectos etílicos, el hombre cayó al subterráneo con una capacidad de tres mil litros de agua, y cómo no hubo alguien que lo ayudará, falleció por inmersión.
En este sentido, cuando los obreros se apersonaron al sitio a continuar con su jornada diaria; se encontraron con esa dantesca escena e inmediatamente dieron parte a los responsables de la construcción.
Luego se notificó del asunto a las autoridades del Cuerpo de Investigaciones Científicas; Penales y Criminalísticas, adscritas a la Delegación de Maracay.
Cabe destacar, que el cadáver de Héctor fue trasladado al Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses en Caña de Azúcar para la autopsia de ley.
A través de esa pesquisa forense, se determinará la causa del deceso. “El Abuelo” era muy conocido en la calle Boyacá y sectores aledaños.

Con información de: El Siglo